SÍNTOMA DE MI DELIRIO
Francisco de Sales
Tu ausencia,
lejos de llevarte al olvido,
de esconderte en el pasado,
de diluirte en la nada,
se aviva cada noche cuando acaparas mi recuerdo.
Cada noche reconquistas
el lugar que antaño ocupaste
monopolizando mis pensamientos.
Cada noche soy tuyo,
esclavo de tu dominio,
pelele de tu capricho.
Tu ausencia es un veneno que poco a poco me mata
dejando sólo tu añoranza indeleble
en lo intangible de mi corazón.
Tu ausencia te convierte en presencia:
tanta tú siempre
es síntoma de mi delirio.