NO ERA ELLA
Francisco de Sales
No es ella, no es ella, no es ella...
Se despertó del sueño doliente
que le engañaba con los besos de ella,
inexistentes,
ponía en aquella voz
las palabras que quería oír,
daba tacto y calidez
al cuerpo etéreo del sueño,
y le autorizaba a sufrir
con su presencia incierta.
No es ella, no es ella, no es ella...
Se despertó gritando,
siendo su propio eco,
sobresaltado,
llorando...
En el sueño ella había vuelto
trayendo lo que no tenía de bueno,
prometiéndole imposibles,
falsificando besos.
No era ella:
Ella era témpano, falsa,
árida, inhumana, veneno...