LLORO POR NADA
Francisco de Sales
Todo me hace llorar.
Todo me lleva a ti.
Todo te trae a mí.
Lloro por nada.
Por nada.
Porque a un olor le haya dado
por parecerse a ti,
o porque un aire se haya arremolinado
como lo hacía para ti,
o porque una brizna de nostalgia
me haya entrado en los ojos,
o porque las compuertas de mis lágrimas
no hayan podido resistir más.
Lloro por nada.
Y ya ves que no me importa.
Ya ves que no me alborotas.
Que lloro por nada.