REPUDIADA TRANSICCIÓN
Francisco de Sales
Me consta que usted ha sido muy amada
y de sobra sé las consecuencias.
Usted, señora, ha sido moldeada
por los efectos y los afectos del amor;
ha sido bendecida por las señales
de la seducción y del encanto;
ha recibido galanterías,
le han piropeado muchas bocas,
y su cuerpo ha sido mil veces recorrido
por los ojos lujuriosos
y los pensamientos lascivos.
Por eso debería aceptar sin lucha
la nueva piel de arrugas tiernas,
la blancura en el pelo,
la torpeza en pies y manos,
y la broma de los recuerdos y la memoria
que se esconden en el olvido.