MIS OJOS Y MI CORAZÓN SON TODO
Francisco de Sales
Ya todo yo estoy en el pasado.
Me he trasladado allí
y me he llevado mis reproches
y todo aquello de lo que me arrepentía.
Ahora me queda la hermosa tarea
de reconstruir una persona,
con la experiencia útil
y con la sabiduría fértil
de conocer lo que no quiero.
Comienzo.
En mis ojos he puesto briznas de sol,
brillos chispoletos,
cielo raso sin límites,
y alegría en la mirada.
Mi corazón está expectante,
abierta su sonrisa a quien esté por venir,
abiertas sus puertas,
abierto al amor.
No necesito más.
Con esto tengo suficiente.
Mis ojos y mi corazón son todo.