EL AMOR ES UN NIÑO
Francisco de Sales
A veces,
el amor es un niño
que busca el cobijo
de quienes le sepan cuidar.
Le gusta meterse en los abrazos,
inmiscuirse en los besos,
y colarse en los corazones si es bien recibido.
Le gusta instalarse en los ojos
y colorear de amor las miradas;
le agrada sentirse cuidado,
alimentado a diario,
querido.
Le encanta perpetuarse en los guiños,
en las palabras secretas de cada pareja,
en sus mejores deseos.
Le complace saber que tiene un sitio,
a perpetuidad,
en las dos personas,
en los dos amantes,
y en el amor eterno
que seguirá creciendo con el tiempo.