POR SIEMPRE AMOR
Así lleva toda la noche:
mirándola desde una nube de amor
con la mirada engatusada,
y la mente en un único pensamiento,
mientras la oscuridad,
lentamente,
torna a luz.
En sus ojos se refleja la silueta,
ajada por el tiempo,
de la mujer que es su vida
desde hace cuarenta años.
Cientos de noches,
acompañado por su insomnio,
la ha visto en esa misma cama
en esa misma postura.
De aquella jovencita un poco asustada quedan
el fulgor de los ojos,
la sonrisa imperecedera,
y el amor.
Cuando se casaron,
con la pobreza como único testigo,
sin cura ni parafernalia,
prometieron amarse
y lo han cumplido.
Cada día.
Tanta belleza se sigue acumulando
en las canas y los años,
que lejos de marchitarse
se renueva cada día.
Así la ve él:
serena, infinita, cálida…
Y el amor hacia ella,
a base de recibir más amor,
crece y se multiplica.