EL FRÍO ES LA DISTANCIA

 

 

Abrígate.

No me digas que tú nunca tienes frío.

Hace frío.

Esto que cae es agua nieve

y en unos minutos puede comenzar a nevar en serio.

¿Te acuerdas la de veces que hemos jugado a lanzarnos bolas de nieve?

¿Y la de veces que hemos rodado juntos y abrazados?

¿Te acuerdas de la primera vez que me besaste?

Comenzaba a nevar, y lejos, no sé dónde,

sonaba un fragmento de La Bohéme.

Dijiste que parecía una escena de película.

Aún me acuerdo de aquel beso.

Para mí era el primero.

Nunca me habían besado.

Me alegra que fueras el primero.

Y el único.

¿Seguro que no tienes frío?

Da la sensación de que por ahí arriba

tiene que hacer frío.

El otro día escuché a uno de la NASA que lo decía.

No sé cuántos bajo cero.

Muchos, así que abrígate.

Amor,

no sé cuál de esas estrellas eres tú.

Si me hicieras un guiño,

una señal clara,

sabría dónde estás,

y sabría hacia dónde apuntar cuando miro al cielo.

Y ahora perdóname,

voy para adentro,

que ya empieza a nevar con ganas

y ahora soy yo la que tiene frío.